Peter Langenham ha conseguido algo único.
Si una fotografía es un instante de tiempo detenido él ha conseguido detener en una sola toma un día completo. 24 horas, 1440 minutos, 86.400 segundos. Todo eso está en una única fotografía.
Como si se tratase de homenajes instantáneos de títulos de películas de los hermanos Marx, algunas fotografías suyas resumen en un instante lo que constituiría un día en las carreras, una tarde en la competición de equitación, una mañana en el basket o un día de fútbol.
Tenemos un espectacular vídeo tras el salto.
Denominadas “escenas colectivas”, Peter Langehahn puede necesitar hasta 3.000 tomas diferentes de un evento para componer las espectaculares fotografías que podéis ver en su página web.
Estamos hablando de un proceso de composición digital que puede requerir de hasta tres meses de trabajo y no menos de seis horas de renderizado. Pero el resultado lo merece. Una fotografía que captura no un instante sino varias horas, como él mismo nos explica.
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