Los japoneses de la cadena NHK han desarrollado un nuevo tipo de cámara acoplada a un mini dirigible para poder usarse como alternativa a las grúas actuales. Está pensada para ser fija en el aire y dispone de un sofisticado sistema de estabilización y de un control remoto.
Resulta increíble la fluidez que tiene la cámara, incluso cuando alguien tira de un cable del dirigible.Esto es posible gracias a una suspensión cardán con 4 ejes y giróscopos que permiten que la dirección de la cámara se mantenga. El sistema completo con la cámara pesa unos 2 kilos y el dirigible puede llevar 4 kilos consigo.
Lo curioso es que el dirigible en sí no se controla, sólo tiene una conexión por cable con el suelo para situarlo, controlar la altura y evitar que se pierda por las alturas, aunque en el caso de que la conexión se corte tiene un sistema de seguridad para ir cayendo.
Está pensado para alcanzar hasta 300 m, con unas condiciones de viento máximo de 7 m/s. Con esto pretenden conseguir tomas más altas que con las grúas y con un coste muchísimo menor.
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